martes, 2 de octubre de 2012

Basta de mitos con la comida

El otro día me quedé anonadada. Shockeada, impresionada, nada. Bueno sin exagerar, nada de esto me pasó, pero ya vengo escuchando que la gente me dice que la comida cacera es mejor que el delivery y yo que soy fan del segundo no lo puedo tolerar. Una vez en mi vida se me dio por cocinar y no se me dio nada bien. Gasté tiempo de mi ser, es más hasta perdí dinero porque todo se me quemó y no vi ningún tipo de resultado positivo más que probar si el matafuegos tenía carga de verdad. Sí, porque no debo ser la única con la duda de si el matafuegos anda o está vencida la carga. Total, uno que sabe. A ver si todavía es como el desinfectador, que nunca desinfecta. Pero volviendo al tema que nos compete, nada más sano que comida vegetariana, yo pido delivery en Belgrano de comida vegetariana y la verdad es que eso es lo más liviano que hay. Además no existe eso de que a la comida le ponen algo. Le ponen lo mismo que le pondría uno. Los de las casas de comida compran el mismo pollo que uno puede adquirir en el supermercado. O acaso es pollo modificado. Ah, pollo artificial. Por favor, pura cháchara, eso no existe. Entonces no entiendo por qué ese trauma, ese mito de que la comida de las casas de tal efecto cae mal si se pide en demasía. Nada que ver, hay de lo que a uno se le ocurra. Seguro que se puede pedir hamburguesas, comida chatarra, papas fritas y alimentos que sean una bomba para el estómago, pero también se pueden consumir alimentos sanos y nutritivos incluso cocinados por gente profesional, artistas que se dedican a eso y que saben lo que hacen. Creo que es suficiente para terminar con este mito.